
Es un momento delicado. Una situación tensa. Puedes sentir perfectamente como por dentro tu corazón late tan rápido que tienes miedo de que el ruido te delate.
Sin embargo, controlas la situación. Sonríes, enarcas la ceja y le das la mano.
Suave... Tan suave como lo deben ser las nubes, o el mismo cielo.
Cuánta ironía se esconde en tus palabras, cuánto secreto oculto. Cuántos te quiero en silencio, cuantas poesías resguardadas.
Y sin embargo, te metes en tu papel.
- ¿La quieres?
- Con locura.
- ¿Aún?
- Para siempre.
"Para siempre... Es mucho tiempo, ¿eh?"
I.D.
No hay comentarios:
Publicar un comentario